El Hombre De La Casa - Relatos Eróticos

El Hombre De La Casa

Hola lectores, me llamo Daniel pero todos me dicen Dani, actualmente tengo 18 casi 19, este relato es 100% real, cada cosa que les contare sucedio, lo que les contare sucedio cuando yo tenia 12 y mi hermano 21, yo siempre e sido muy bajo de estatura, cabello rizado, blanco y con un cuerpo normal tirando a gordito, por eso mismo siempre e sido nalgoncito, desde que tengo uso de conciencia yo ya sabia que era gay, siempre tuve gusto por los hombres y me gustaba jugar con muñecas. mi familia nunca me lo nego y nunca me dijo nada, aun asi yo no les habia contado mi homosexualidad, creo que era tan obvio que no hacia falta, Cuando yo tenia 11 años mi padre fallecio dejandonos a mi madre, mi hermano David y a mi, mi padre antes de morir tuvo la maravillosa idea de decirle a mi hermano que tenia que cuidar de mi madre y de mi, que ahora el era el hombre de la casa, que debia protegernos, el acepto y en cuanto mi padre murio el se volvio malvado, con mi madre el era amoroso, comprensivo y tierno, mi madre seguia trabajando, gracias a la vida no teniamos problemas economicos, todo estaba bien por asi decirlo, mi hermano seguia en la universidad y yo en secundaria. Un buen dia mi hermano de la nada comenzo a tratarme mal, mientras mi madre trabajaba el me obligaba a limpiar, lavar su ropa e incluso cocinarle lo poco que sabia, lavar su ropa no me disgustaba, me gustaba sentir el olor de sus boxers, casi nunca me tocaba lavarlos, antes no sabia por que pero ahora me doy cuenta de que ...

... no se cambiaba de boxers, siempre tenian unas manchas blancas y otras amarillas que me volvian loquito, al acercarlos a mi nariz sentia como su olor me golpeaba el rostro, era delicioso, lo unico que me gustaba mas que sus boxers eran sus shorts de futbol, eran de tela satinada y nada me gustaba mas que tocarlos, sentir la tela fresca y brillante en mis manos, siempre que lo lavaba era porque las manchas amarillas de sus boxers traspasaban la tela, eso me ponia muy caliente Mi hermano llegaba de la universidad, yo le servia la comida y comiamos juntos, me gustaba verlo mientras comia, era muy guapo, alto, blanco, de cabello negro y algo largo, ceja poblada pero con buena forma, cara de enojado y un cuerpo muy rico, para mi el era el hombre mas guapo del mundo, luego de comer se cambiaba mientras yo lavaba los platos y el salia a echarse una cascarita con sus amigos y luego de eso se echaban unas cervezas, me gustaba servirle, en mi mente eramos marido y mujer, esa era rutina de todos los dias hasta que un buen dia todo cambio, mi hermano entro a la casa luego de echarse la cascarita y las chelas, se sento en la sala y por lo cansado que estaba apenas si podia hablar, se estaba quedando dormido y me dijo- Enano! dame un masaje, yo simplemente sonrei y me acerque a el, le quite los tacos de futbol y el olor de sus patas llego a mi naricita, wow, era delicioso, era todo un macho, le quite los calcetines y comence a masajear sus pies, eran enormes, calzaba muy grande, el solo ...