Mi solitaria madre (4° relato) - Relatos Eróticos

Mi solitaria madre (4° relato)

... Madrea: Bueno nada más me doy un baño Termino de bañarse, se puso un pijama de dos piezas con dibujos de osito, cenamos algo ligero y nos quedamos viendo una película en la tv, cuando termino la peli apague la tv, no levantamos y me disponía a ir a mi habitación cuando: Madre: Que no te que te ibas a dormir conmigo. No podría creer lo que estaba escuchado y un poco nervioso conteste: Yo: Esta bien si tú quieres Nos dirigimos a su habitación y sin decir ni buenas noches me acosté y me quedé dormido, estaba algo cansa había dormido muy poco los días anteriores por la escuela. Eran como las 3 de la mañana cuando me levante al baño, esa noche era más fría que las anteriores, estábamos a mediados de diciembre, así que cuando regrese a la cama no podía volver a calentarme, pero sentí el calor de mi madre llamándome así me fui acercando poco a poco quedando mi miembro a unos centímetros de su trasero, podía sentir su calor y recobre mi temperatura ese día no llego a más. Me desperté mi madre no estaba, eran como las 10. 00 a. m. , bajé a la cocina y hay estaba preparando el desayuno, mi padre llegaba normalmente a medio día, así que lo esperamos para desayunar todos juntos. Ese fin de semana paso sin más, el lunes desperté tarde no tenia que ir a la escuela por las vacaciones, todo el día no hice más que holgazanear, hasta la noche que era nuevamente hora de dormir, cuando mi madre comento: Madre: Bueno vamos a la cama que ya es hora de dormir y hace mucho frio. No dije nada y ...

... fuimos a dormir. No acostamos, pero yo no podía dormir en primera por la excitación que me provocaba el pensar que tenia a esa hermosa mujer a escasos centímetro, trataba de distraer mi mente pensando en otras cosas pero siempre terminaba pensando en diferentes formas tomar a mi madre y hacerla mía, todo el tiempo con el pene erecto a todo lo que daba, después me gire hacia donde estaba mi madre sin acercarme, seguía sin poder dormir cuando empecé a sentir que algo comprimía mi pene erecto, era el enorme trasero de mi madre el cual me estaba empujando, pensé que mi madre tenia frio por eso se acerco buscando calor, pero unos segundos después sentí como se movía de arriba abajo lentamente, en ese momento se me congelo la piel, ni en mis mejores fantasías hubiera imaginado que eso estuviera pasando, después se detuvo y sin voltear, movió su mano hacia atrás y empezó a sobar mi pene por encima del short lo apretaba y lo jalaba, lo acomodo mejor entre sus nalgas y volvía a empujarme moviéndose lentamente, estaba tan excitado y sin poder moverme, involuntariamente le di un beso en la nuca. En ese momento mi madre le levanto asustada encendiendo la lampara de su tocador, grito: Madre: No estabas dormido Pude ver su cara aun mas pálida de lo que era. Yo: No (un poco asustado), pensé que sabias que estaba despierto. Madre: No perdóname hijo (una lagrima cayo por su mejilla), no debí hacer eso discúlpame, no se lo que paso. Yo: No te preocupes, no hiciste nada que no quisiera. Madre: No ...