1. Noche de guardia movidita


    Fecha: 01/01/2019, Categorías: Infidelidad Autor: Lobo Feroz, Fuente: CuentoRelatos

    ... sonreír, sonrisa que muta en risa sin sentido.
    
    –Gracias, gracias… -cuando pudo articular palabra. No me pasó una cosa así, me descontrolé, creo que me desmayé. Es la primera vez de este modo. Es fabuloso.
    
    No sabía como agradecerme su primer orgasmo, esta experiencia la embargaba totalmente, que todavía no podía procesar esta situación, solo disfrutaba.
    
    - Ahora te toca a vos amor. Te voy a coger!!
    
    Me besó todo, comenzó en los ojos, bajando con lentitud hasta llegar al miembro, asido con una mano, pajea con suavidad, la lengua recorre toda su extensión llega a los huevos, vuelve al glande, toma el líquido preeyaculatorio, la introdujo en de su boca. Mamada sin precedentes. Deseaba probar qué era mamar una pija; su marido no la deja, decía que “es cosa de putas”. Me hizo una mamada de película!
    
    -Pará, pará! Si no voy a acabarte en la boca, y la retiré.
    
    -Y que... Dale! quiero probar, me la voy a tragar, toda, ¡qué venga!: Es mía, es mía!
    
    -Esperá ansiosa… dejame acomodarte –la coloque en un “69” yo abajo.
    
    -Qué bueno!, dijo esto tampoco, nunca de esta manera.
    
    Recomenzó nuevamente la mamada infernal, yo me metido entre sus piernas seguía la chupando la conchita jugosa, late al ritmo de mis lamidas. De pronto vibra, gemidos y grititos (sacó el miembro de la boca para no ahogarse y poder tomar aire) prólogo de otro orgasmo intenso. Podía vivirlo en "vivo y en directo" desde el epicentro de su clímax, conectado en al clítoris por lengua. Sin recuperarse del ...
    ... todo, sigue en la mamada con intensidad y dedicación, ayudando la mano en una paja simultánea. Sentí la electricidad de mi cuerpo, señal inconfundible de la incontenible y perentoria acabada.
    
    - Ya me viene! -dije, sujetándola de los cabellos, empujando hacia abajo.
    
    Acompañaba su mamada levantando la pelvis cogiéndola en la boca.
    
    -Tomá!
    
    Envión a fondo, me descargué en su boca. Un chorrazo de leche, otro empujón y otro y otro más, descargan el lácteo de la brutal calentura. Salió leche como nunca antes.
    
    Totalmente laxo, descanso pero ella no retiró su boca de la fuente láctea hasta que fue perdiendo, la rigidez inicial. Al salirse tragó todo el semen.
    
    – Papito, la primera vez que me acaban en la boca, realmente me gustó y no sabía tan mal como dicen. Gracias, te lo debo, vos te lo merecés todo, repetía y repetía.
    
    Unos minutos más y ya la estaba penetrando, encima de ella, patitas al hombro, máxima exposición, cuando el coito alcanzaba su máxima intensidad, coloqué mis manos en sus nalgas apretándola más contra mí. Laly pidió, más fuerte: - “Haceme mierda” (sic), “rómpeme toda”!
    
    – Rompeme toda, por favor! pedía a gritos.
    
    Enfurecido, se la enterré toda, bombeé con intensidad, como un cuarto de hora, a más no poder, avisa que está lista para otro orgasmo. Seguí la intensidad alentado por sus ayes de placer. Cuando se calmó un poco, la di vuelta boca abajo, en cuatro patas, se la enterré a fondo. Mientras la metía disfrutaba el espectáculo del precioso ...