1. Nuestra amiga argentina de vacaciones 2016


    Fecha: 18/12/2018, Categorías: Grandes Relatos, Autor: dantraloco, Fuente: CuentoRelatos

    ... era, mientras con Tati que estaba al lado mío, nos partíamos la boca y nos tocábamos todas, las tetas, las pancitas, mientras sentía una mano traviesa que me acariciaba, solo me acariciaba la cola, y eso ¡me pone loca!, la miro a Tati siento sus gemidos y le estaban haciendo lo mismo, acabamos las dos juntitas.
    
    Nos apoyamos sobres nuestros chicos mientas esas manos traviesas, que no se ni de quien eran siento que me empieza a meter un dedo en la cola, después dos, yo re caliente, me besaba con mi chico y con Tati, hasta que nos empiezan a las dos a coger por las conchitas y por el culo y las otras dos pijas en la boca, la verdad, que lo que me acuerdo era solo placer, estar entregada, dejar que nos hicieran de todo, ser solo un cuerpo que quería sexo, nada más, y dejarme coger como ellos querían, no me podía ni mover, hasta que acabé y al toque siento que también acaba Tati.
    
    Ya totalmente jugada, entregada, sin saber lo que hacía, unos de los chicos (de eso me acuerdo) me prende un faso y me lo da, y otro a Tati, estábamos las dos en la cama con los seis chicos alrededor nuestro, nos fumamos los fasos.
    
    No sé cuánto tiempo tardamos, perdí, la noción del tiempo, pero al rato a mí me estaba cogiendo el tatuado y a Tati un amigo y otros chicos nos ponían las pijas en la boca, yo al menos se la re chupé, mientras le acariciaba los huevos, hasta que me llenó la boca de leche, la tragué y acabé de nuevo, y Tati, no sé, pero la oía gemir y gozar como una turra.
    
    Ya no ...
    ... daba más, me habían re cogido, y de nuevo me dan un faso a mí y a Tati, y obvio los fumamos las dos.
    
    Terminamos de fumarlo y al rato siento una pija que se me mete en la boca, después otra, la miro a Tati y le hacían lo mismo, nos terminamos chupando las seis pijas las dos solitas, hasta que nos acabaron, en la boca, en la cara, en las tetas, terminamos las dos encastradas y como premio para los chicos. Así, encastradas, nos empezamos a besar, pero los besos fueron cada vez más fuertes hasta que nos empezamos a poner los dedos en las conchitas, mientras los chicos nos tocaban, sentía las caricias de ellos en todo mi cuerpo, en mis tetas, en mi panza, en mis piernas, hasta que terminamos acabando las dos juntas, como dos lesbianitas (a mí no me podía faltar eso).
    
    Después, ya no sé qué pasó, no daba más, ¡me quede dormida! Me despierto, no sé ni qué hora era, y me encuentro durmiendo con Tati ¡en bolas en la cama!
    
    Lo pensé y no lo dudé, la despierto con un beso, ella seguía medio dormida, la empiezo a acariciar, voy a su conchita, y ahí si se despertó, se la empiezo a chupar, me doy vuelta, hicimos un 69, pero bien hecho, nos chupábamos las conchitas, mientas nos metíamos los dedos en la cola, hasta que acabamos como dos perras en celo que hacían años ¡que no cogían!
    
    Los chicos, nos habían dejado la ropa en el cuarto, nos vestimos, nos dijeron de quedarnos a desayunar, les dijimos que no, que estábamos muertas y nos fuimos, la deje a Tati en su casa y yo me fui a la ...