1. Una belleza Prohibida


    Fecha: 12/12/2018, Categorías: Infidelidad Autor: gerwdo, Fuente: RelatosEróticos

    Tal y como y patológico, común en cualquier hombre, la atracción hacía la hermana de tu novia es absolutamente inevitable. Te lleva, te invita a caer en ese delicioso error. No prospera ante tu escasa responsabilidad. Como un estandarte de lo prohibido, del placer inherente, te empuja hacia lo profundo de tus fantasías eróticas y simplemente te olvidas de todo aquello que supuestamente importa. Tu novia, la tus suegros y cuñados, la familia que ganaste queda en segunda plano.
    
    Todo fue parte del pasado cuando frente a mí, casi como incitándome, se paró la belleza de mi cuñada. Una pendeja que partía la tierra de buena. 16 años, pero muy inteligente, siempre supo que está buenísima y le encantaba que la miren. Me manejaba, me derretía. Ella conocía mi debilidad y se divertía con eso. Simplemente cuando iba a lo de mi suegros peleaba con mi novia porque según ella, siempre miraba tele. Es que Mi cuñadita siempre miraba las novelas de la tarde, y yo con ella tirado en el sofá. Siempre con juego de manos, me encantaba rozar esas tetas recién maduras, dos ronditos senos, se me paraba la pija de rozarlos. Una petiza con cinturita, ¡y esa cola!, era una manzana. Dios! siempre de calza, no se si no usaba bombacha o era una tanguita muy pequeña. Lo único que se distinguía era la perfección. Muy parecida a mi novia pero esta versión no tenía errores. Ambas con unos ojos verdes oliva que se esclarecían hacia el centro. El pelo castaño le pasaba los hombros. Mirarle la carita era ...
    ... estar en una nube. Y una vos muy chillona, siempre quise escucharla gozar con esa vocecita.
    
    Cualquiera, no hubo nadie que la conozca al que no le guste esta princesa. Pero yo, yo me moría por comérmela entera. Lamer esa conchita quizás virgen, hasta que se corra entera. Era una bomba, justo rozando lo inmoral, absolutamente prohibida para mí. Pero esa tarde, en ese sofá, baje la línea de mis limites casi hasta el suelo y lo deje a la suerte. Me deje llevar y en entre jugueteos y rizas cada ves era mas evidente como la tocaba. ¡Tenés 25 años y mira lo que estás haciendo! -pensaba para dentro. Pera nada me importaba ya.
    
    Tuvimos una conversación muy interesante. Indagué sobre su novio. De la mano llegó tema del sexo. Según ella lo había hecho con el novio pero no tenía cara de entusiasmada por el desempeño de este según pude comprobar. Por lo que me volvía loco pensando en como la haría disfrutar. De todas las maneras posibles, mi principal objetivo es que goce, que acabe todo el jugo en mi verga mientras le hablo al oído.
    
    Para mi suerte estaba en una discordia amorosa. Eso me dio un buen tema de conversación. Le aconseje, que salga y se divierta. Que busque otros chicos y disfrute. Mientras yo parecía un libro de autoayuda. Sin previo aviso, entre tantos cumplidos de mi parte, le urgió un abrazo que fue brutal.
    
    - Ayyy!! me das un abrazo - me dijo haciendo trompita.
    
    Para mi dicha yo estaba con la mente despierta, siempre esperando cualquier oportunidad. Y con algo de ...
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