Algo mas, el doble.
Fecha: 03/12/2018,
Categorías:
Infidelidad
Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos
... la más gorda que había visto, y aun le faltaba estar preparada para mí. Con suavidad, me la metí en la boca todo lo que pude, llenando mi boca. La ensalivé bastante al tener que abrir tanto mi boca, sus huevos eran gordotes, cayendo por el efecto de la gravedad sobre el sofá. David se desabrochaba la camisa apareciendo un pecho bastante velludo y trabajado por el gimnasio, moreno, sin exceso, bajando hasta su entrepierna bastante bien arreglada, dejando sin pelos sus pelotas. Saque lo que ya apenas cabía en mi boca, para lamerla de arriba abajo, repartiendo mi saliva por todo aquel tronco, llegando a sus testículos, lamiéndolos, levantándolos con mis manos, para lamer bajo ellos, cosa que le hizo resoplar y noté como su polla se tensaba aún más ante mí. Volví a subir hasta su glande, completamente descubierto y de un tamaño similar al del resto de su pene. Apenas podía hacerme con el glande en su boca, pero seguí haciéndole una mamada. Me retire, y acerqué mis tetas a él, atrape su polla con ellas, y la masajee, apretando fuerte con mis manos, para que su piel la cubriera y se retirara completamente. Pasados un minuto, me retiré. Me levanté y quite mis zapatos, desabroche mi falda bajando lentamente la cremallera de mi cadera. Veía como se estaba tocando mientras me miraba dejando caer la falda a mis pies. Braguita brasileña negra, encaje, con la parte trasera casi transparente con una pequeña sorpresa, un corazón abierto dejando ver el comienzo de mis nalgas. Me gire, ...
... me agache con las piernas rectas a recoger mi ropa del suelo. Dejando ver mi sexo ante el, tapado por una fina tela, que ya dejaba ver mis fluidos empapándola. Me agarro fuertemente y me tumbo sobre la mesa de trabajo, fría, de nuevo mis pezones lo agradecieron, me arranco la braguita y apareció mi sexo completamente depilado ante él. Agachó su cabeza entre mis muslos y con sus manos abría mi sexo, rosado, húmedo, lamia fuertemente, me gustaba, Yo empecé a acariciar mis pechos con mis ojos cerrados, dejándome disfrutar del sexo. No tardó mucho en cansarse de jugar solo con la lengua, y en esa posición, se acercó con su polla a mi entrepierna, insertándola de un golpe, primero hasta la mitad, abriéndome por dentro, sintiendo un gran placer en cada embestida mientras mi coño se hacía a su grosor, poco a poco la notaba más dentro, y a los pocos segundos, ya notaba sus pelotas golpeándome rítmicamente en mi perineo. Eso me encanta. Pero lo que realmente me encantaba era notar su paso abriéndome bien dentro de mí. No cruzábamos casi ninguna palabra, estábamos dedicándonos a follar. Mi primer orgasmo llego rápido, lo acentué tocando mi clítoris frenéticamente mientras me embestía una y otra vez. Me quede extasiada tras ese primer clímax, pero no paro de embestir al mismo ritmo, llevándome a otro orgasmo casi de continuo. Al notar ese segundo, el salió de mi para cogerme de la mano y llevarme hasta el sofá. Me coloque a cuatro patas, y me volvió a insertar su miembro, esta vez ...