Volviendo a Jugar. El segundo día en el spa (parte 1)
Fecha: 11/01/2025,
Categorías:
Erotismo y Amor
Autor: EsposoURU, Fuente: CuentoRelatos
... músculos de las piernas, como se me curvaban los pies, las expresiones de mi rostro, hasta que exploté. Ella me dijo que un día quería probar lo que habíamos visto en el video pero no ese día ni en un plazo cercano.
Luego de desatarme las manos, descansamos un rato al borde de la cama, conversamos y le pregunté dónde había tenido guardado el huevo, ella me confesó que en el ano, para evitar una caída accidental que no iba a suceder por la firmeza del traje de baño y le pregunté si lo quería de nuevo allí, me dijo que no era problema pero lo prefería en la vagina, me levanté a buscarlo y traje el huevo y el nuevo dildo eyaculador con vibración.
Al volver del baño, ella estaba desnuda, parada al lado de la cama, mirando a lo lejos, con una mano delante, cuando me aproximo veo de reojo que estaba mordiéndose el labio inferior, y con la mano que yo no veía se pellizcaba un pezón, el huevo no estaba en el lugar donde lo había dejado, tampoco pregunté. No se oía vibración alguna, pero seguramente estaba encendido. La invité a ir a la mesa de noche a cargar el depósito del nuevo dildo, que no fue muy fácil, ya que el nuevo lubricante era espeso como el semen. Ella sentada en la cama seguía con atención mis movimientos para llenar el dildo, luego de llenado, apreté el depósito y el líquido corrió por el canito hasta que apareció por la cabeza del consolador y chorreó por el costado cual si fuera semen, y volví a llenar el depósito que había bajado. Le pregunté si estaba lista ...
... para probar el nuevo juguete y le pedí algunas instrucciones.
Me dijo, que trajera una toalla para no ensuciar toda la cama, que no lubricara el dildo para insertarlo porque con eso que derramó ya alcanzaba, que le sacara el huevo de su vagina que estaba cerca de un orgasmo, pero ya
“Sácalo ya!”
Si vagina estaba bien lubricada, mucho menos abultada que el día anterior, el huevo se deslizó sin problema, seguramente habría algo de lubricante dentro de la vagina o ella lo insertó lubricado. Antes de insertar el nuevo dildo le indiqué una posición para no derramar tanto, ella debería tener varias almohadas bajo su cadera para que ésta estuviera más alta que el resto del cuerpo, así que ubicamos cuatro almohadas y la toalla y ella se acostó arriba, luego le sujeté un tobillo con la cinta de la bata, se la pasé por detrás de su cabeza y le até el otro tobillo con el otro extremo, por lo tanto quedó con ambas piernas hacia arriba, sus rodillas al costado de su abdomen y los pies en alto, con su cabeza ligeramente levantada y su cadera bien alta ella podía ver todo lo que acontecía en su vulva, le pregunté si estaba cómoda y asintió.
“El nuevo dildo es casi del tamaño del que estrenamos ayer le dije, puedes con él?” dije
“Puedo con eso y mucho más” contestó.
Metí dos dedos en su vagina, luego tres, los giré, los metí y los saqué ha hice fuerza para abrirlos y había lugar para un cuarto y quinto, pero en este momento era momento del dildo nuevo. Pasé la cabeza por su ...