1. El peor relato porno de la historia


    Fecha: 04/01/2025, Categorías: Relatos Cortos, Autor: Martina Paz, Fuente: CuentoRelatos

    ... cada vez que te tengo entre ellas. De verdad…
    
    Bien, ya te la chupé y te pajeé con mis tetas. Te encantan mis tetas, ¿verdad? A mí también. Como ya te conté en el relato anterior, puedo pasar horas frente al espejo mirándolas y tocándolas. ¿Qué si me las chupo? Obvio, me encanta chupar tetas. Sobre todo, las mías. No podés creer que sea tan puta, ¿verdad? Acostate en el piso. No importa que esté frio, estoy yo para calentarte. Termino de sacarme toda la ropita y estoy con vos. Me saco la pollerita. No, el short. ¿O preferís que sea un jeans? Bueno, dale. ¿Tanga roja o negra? ¿Roja y negra? ¿De Newells o de Colón? Si a vos te calienta…
    
    Ya desnudita, con todas mis bellezas al aire, me siento despacito sobre tu pija. ¡Estás al palo, papi! ¿Qué estará haciendo Cami? Recién le dije que cuando lea mis mensajes y no pueda responder, que al menos me envíe el emoji de una palmera para saber que está todo ok, y que no está en una capsula a punto de ser inseminada por Aliens. Me dijo que─ ─ Perdón, perdón. Volví. Pongo tu pija entre mis piernas, me froto sobre ella, notando que no das más. ¿Me la querés poner? Tus ojos en llamas ...
    ... gritan que sí. ¿Y para qué está la Martinita si no es para complacerte? Agarró tu pija y la meto lentamente en mi conchita. Mmm… que rico se siente… empiezo a moverme despacito, de atrás hacia adelante, sin meterla hasta el fondo. Amor, que rico que sos, que hermosa pija tenés, ¿por qué no me coges todos los días? ¿Ah, por qué? Decime, hijo de puta. Empiezo a moverme más rápido, intercalando movimientos circulares con sentones. Me encanta como se te van los ojos, como te mordes los labios. Si, hijo de puta. ¿Te gusta cómo te cojo? ¿Sí? ¿Qué nadie te coge como la puta de los relatos? Dale papi, lléname la concha de leche, ¿sí? Dale bebé, dámela toda. ¿Qué ya vas a acabar? ¿Me querés llenar la concha de leche o querés que me la tome? Dale, me la tomo. De un salto me libero de tu pija, me pongo al costado y empiezo a pajearte. ¿Ya viene? Abro la boquita y la espero. Dale, papi, dámela. Sí amor, me la quiero tomar toda.
    
    Acabaste. Que rico. Que rica que es tu leche. Te chupo la pija hasta dejarla seca. Hasta que te duela tanta succión. Me tengo que ir a dormir. Ojalá los dioses quieran que hoy vuelva a soñar con Cami. Chau. 
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