Mi amigo de la infancia
Fecha: 23/11/2024,
Categorías:
Fetichismo
Autor: LadyMelissandre, Fuente: CuentoRelatos
... poder colarse en mi ojete, cada vez intentaba meterla más y más y en ese punto ya me daba igual si mi culo estaba sucio o no, la sensación era increíble, con las pocas fuerzas que tenía jadeaba o gemía en respuesta al movimiento.
La lengua de Miguel logro dilatar un poco mi culo, sentí como Migue se levantó un instante de la cama y se dirigió a mi costado en la cómoda que estaba junto a mi cama, tomo el aceite de bebé que en ocasiones uso para la piel, volvió a introducir su lengua en mi ojete está vez con más calma, lo estaba disfrutando, puede escuchar el sonido de la botella al abrirse y sentí como su dedo anular intentaba entrar mi culo, sus manos eran tan grandes y rasposas, las manos de un hombre recio y trabajador, mi culo respondió por reflejo y se apretó en respuesta recibí una nalgada muy fuerte y palabras vulgares que jamás me habían dicho durante el sexo, escuché con voz de mando un "abre el culo puta".
Jamás me habían dicho eso durante el sexo pero por alguna razón me excito bastante, Miguel no es precisamente muy paciente como notaron, sentí nuevamente esa enorme polla, está vez contra mi ano, sentí cómo empujaba contra el para intentar colarse en mis entrañas, yo gritaba de dolor, soy una amante del sexo anal, pero jamás me habían intentado meter la polla de una forma tan brusca y menos de ese tamaño, le pedí que parará un poco y en respuesta tuve las misma palabras "abre el culo putita", siguió forzando la penetración hasta que finalmente logro meter la ...
... cabeza de su pene, solté un grito sollozo y una nalgada muy fuerte de el en respuesta, una vez la cabeza dentro de mi culo, empezó a balancear su cadera de forma fuerte y brusca, al igual que con mi coño Miguel quería romperme por completo el culo, una sensación empezó a recorrer mi cuerpo desde el culo, el estómago y me provocaba escalofríos, sentía como si me fuera a cagar.
Le dije a Miguel que parará y no lo hizo, sentía como las paredes de mi ano se contraían y mis músculos también, mis nalgas se apretaban y unos segundos después sentía mi vagina demasiado húmeda, jamás había tenido un orgasmo anal así, mi cerebro estaba muy confundido, el culo lo tenía adolorido y aun así estaba excitada y estaba disfrutando aquella tortura anal, Miguel clavaba sus dedos en mis nalgas, las estrujaba a la par de las penetraciones, me daba nalgadas muy fuertes y cada vez me decía más elogios vulgares "que rico culito tienes" "quien es mi putita" "te encanta la verga puta".
Jamás me habían tratado como a una cualquiera, era la primera vez y lo estaba disfrutando, las embestidas anales de Miguel aceleraron su ritmo, sentí como su polla nuevamente se estaba hinchando y está vez no se detuvo, continuo hasta que sentí como se corrió dentro de mi culo, nuevamente la sensación de querer cagar me estaba invadiendo, Miguel retiro su polla y se dirigió al baño por papel higiénico para poder limpiar su miembro de algunos residuos de mis entrañas, yo corrí detrás de el al baño y pose mis nalgas ...