Atinan-En un balneario de Praga
Fecha: 18/10/2018,
Categorías:
Erotismo y amor
Autor: almogaver92, Fuente: RelatosEróticos
... tranquilamente de banalidades. Jordi, -que así se llamaba el chaval- mientras tanto, me lanzaba miradas de deseo. O eran imaginaciones mías? Pasé del tema y me metí de lleno en la conversación, hasta que de repente, un pie me tocó la pierna. Me quedé paralizada. Sería el chaval? O una de mis amigas, que había decidido estirar las piernas? El pie subió poco a poco por mi gemelo, y bajó, frotándose en mi pierna. Vale, o una de mis amigas se había vuelto lesbiana de repente, o Jordi quería algo conmigo. Intenté mantener la calma mientras una sensación de vértigo subía rápidamente por mi estómago. Que hacía? Nunca había estado en una situación similar, y Jordi mantuvo la calma todo el rato, de hecho no parecía que fuese él quién me estaba tocando. A pesar de mis nervios e inseguridad, no aparté la pierna. Lo podría haber hecho, o podría haberle gritado y le habrían echado, pero algo dentro de mi me lo impedía, estaba disfrutando de aquella situación tan peculiar y excitante.
Finalmente me sobrepuse a las sensaciones que me inundaban y volví a meterme en la charla, pero ahora devolviéndole las miraditas. Que situación tan morbosa! Aunque estuviese fuera del agua, creo que estaría mojada igual!
Estuvimos así un buen rato hasta que se nos terminó el tiempo de estar ahí. Teníamos que salir del agua, pero estaba Jordi mirándonos. Joder que vergüenza. Nos miramos las unas a las otras de forma inquisitiva, y el chico se percató. El muy cabrón disfrutaba de nuestra situación, ...
... claro, a él le daba igual, ya venía sin toalla.
-Yo ya estoy cansado de agua, si queréis salimos juntos -nos propuso.
-Venga vale -dijo Vanesa. -Uno, dos, y tres!
Y solo se levantó Jordi.
-Pero vaya tramposas estáis hechas! -nos dijo riendo. -Venga, todas arriba, que no pasa nada mujeres!
Su alegría y desvergüenza nos hizo reír a todas, pero ninguna se atrevía a dar el primer paso. Entonces, no se que diantres me pasó, e hice algo que nunca habría hecho. Me levanté despacio, mirándole a los ojos mientras mis amigas me miraban incrédulas. Si el chaval creía que iba a llevar la iniciativa conmigo, estaba equivocado.
-Woow!woow!! -me vitoreaban mis amigas. A pesar de ponerme roja como un tomate, no me di ninguna prisa en coger la toalla, ni aparté la vista del catalán, que me miraba con una mezcla de aprobación y desafío.
-Lo ves? No era tan difícil, a que no está mal? Esa libertad que te da ir en bolas es una sensación agradable.
Y no le faltaba razón. Aún así, me puse la toalla alrededor del cuerpo, tapándome.
-Venga, salid chicas -les dije a mis amigas.
-Hmm...creo que nos quedaremos un rato más, por que no te vas a tomar algo con Jordi? Luego nos encontramos para la cena. -Dijo Sara.
-Qué? -me quedé totalmente paralizada de miedo. Una cosa era un poco de juego debajo del agua, incluso mostrarme desnuda ante aquél desconocido me había gustado, pero aquello me parecía demasiado! Mis amigas me habían traicionado. "Malditas Judas" pensé sin saber qué ...