Sesión de modelaje.
Fecha: 15/01/2024,
Categorías:
Infidelidad
Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos
... propósito para escucharme gritar más fuerte.
Luego comenzó a viajar con los azotes hacia abajo a través de mi vientre hacia sus muslos, lo que provocó un alivio momentáneo de mis pechos doloridos, pero luego más pánico cuando me di cuenta de adónde se dirigía con el flagelador. Seguramente no azotaría mi coño. ¿O lo haría?
Sí, lo hizo. Después de alternar la parte interna de mis muslos izquierdo y derecho, pintándolos en un delicioso tono rosa intenso, dirigió su atención a mi coño. Pero el golpe que esperaba nunca cayó.
En lugar del azotador de Gregorio, llegaron Margarita y Sofía con jabón, agua y una navaja. “Es hora de limpiar”, anunció alegre Sofía.
La miré fijamente. "¿No me digas que te hicieron esto a ti también?"
Sofía se rió y Margarita también. “Oh, por supuesto. Y nos pagaron tan bien como te van a pagar hoy a ti. Zorra”
Las dos mujeres hábilmente enjabonaron y afeitaron mi coño delante de la cámara. Sofía comenzó a frotar aceite fragante en la carne del montículo púbico recién afeitado y por toda mi vulva.
Los negros que había protagonizado la primera grabación volvieron a entrar. Yo casi me arrepentía de haber accedido a realizar todo aquello, por mucho dinero que fuesen a pagarme. Gregorio me había dicho que podía renunciar en cualquier momento, pero avisándome de que ello implicaría el no cobrar la última sesión. Decidí esperar, aguantar un poco más.
El negrito delgado de inmensa polla me giró la cabeza con brusquedad y me ...
... dijo:
“Chupa, guarra. Antes lo estabas deseando” Y lo peor es que tenía razón.
Todo estaba siendo grabado. Los azotes de Gregorio en mis tetas, la sesión de afeitado y ahora como la polla del negro entraba en mi boca hasta hacerme dar arcadas al chocar con la garganta. No podía mirar hacia abajo porque me sujetaba del pelo de forma que solo veía su vientre y los ricitos negros de su ensortijado vientre, pero sentí lametones en mis pechos y como me penetraban el coño con otra polla enorme..
En un entreacto en el que el negrito sacó su verga de mi boca pude ver a Gregorio acariciándome el coño con la palma de su mano y los dedos. Un dedo se desvió hacia mi ano, haciéndome estremecer.
Él sonrió diabólicamente y me montó una vez más. Esta vez condujo su polla hasta el interior con un solo empujón y estableció un ritmo furioso que provocó gemidos de placer en mi pecho. No disminuyó la velocidad ni se detuvo. Gotas de sudor brotaban de su cuello y parte superior del pecho. Su propio ritmo de excitación también se aceleró. Entonces él se puso rígido, y yo pude sentir su pene latiendo en mi vagina mientras me entregaba su preciosa carga de semen en los profundos recovecos del coño. Las manos de otros dos chicos de color magreaban mis pezones y los pellizcaban con fuerza mientras otros dos chicos de color se masturbaban esperando su turno. Todos me penetraban por turno. A veces el culo, otras el coño. La boca siempre la tenía ocupada mamando vergas con el sabor de mi coñito o del ...