1. Mi hermana y yo compitiendo


    Fecha: 30/09/2018, Categorías: Bisexuales Autor: axel, Fuente: CuentoRelatos

    ... maneras que se me ocurran de hacerte acabar!!!"
    
    -"Cerda inmunda!!!" -Le respondí entre riéndome y llorando, mientras me quitaba lo único que tenía yo puesto, que era un shortcito, quedando con mi tremendo chorizo completamente empalmado y vibrando al aire, ahí delante de ella como esperando que me capturara, cosa que hizo largándose las carcajadas, comenzando ahí mismo a manosearme entero haciéndome las más enloquecedoras cosquillas, mientras yo gritaba desesperado, pero dejándome hacer completamente sumiso y feliz.
    
    Mi hermosa y robusta hermana se revolcaba encima mío pajeándome y manoseándome enterito, y yo gritaba desesperado sacudiendo mi cabeza en medio de cosquillas por demás atroces que ella me hacía sin piedad.
    
    Montándose sobre mi pecho conmigo tendido de espaldas en el pasto ahí donde nos encontrábamos, me pajeaba a dos manos y me zampaba besazos en la punta del chorizo empinado y duro como un fierro, mientras yo brincaba y pataleaba y gritaba como un loco, hasta que sentí las avalanchas orgásmicas invadirme el cuerpo entero, y por mi gruesa y empinada verga los chorros más despampanantes de leche empezaron a saltarme verga afuera, regándole la cara a mi hermana que se largaba las carcajadas refregándose la punta de mi chorizo por la nariz, boca, y toda la cara mientras la leche saltaba y yo estallaba en esos orgasmos que me hacían hasta aullar y patalear debajo de mi hermana así comenzando aquella cosa que estaba resultando el bautismo de lo que iría a ser en adelante, nuestra relación calientemente incestuosa con ella.
    
    Riéndose mi hermana exhibía su cara y pelo y brazos y pecho y vientre regados con los gruesos chorretes de mi leche como si se hubiera enchastrado todita con crema blanquísima, y me miraba riéndose burlona mostrándome lo que me había hecho.
    
    Así fue mi manera de caer a los pies de mi hermana, que fue de ahí en adelante mi dueña absoluta, y yo su caliente esclavo.
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