Muy sucio, pero muy rico - Relatos Eróticos

Muy sucio, pero muy rico

Hola soy hija única con 15 apenas ya casi termino la secundaria. En mi barrio son casi todos parientes nuestros.
El hermano de papá vive a dos casas. Tiene unos 55 más o menos y siempre me busca para hablar, cómo me gusta lo provocó y se que me desea.
Me dice cosas que me gustan y cuando me saluda siempre es un beso cerca de la boca. Me abraza y me toca la cola mientras me aprieta contra su bulto
Yo trato de andar de pollerita o con shores que me dejan media cola a la vista
Me despedía de el cuando al darme un beso me abrazó y mientras me tocaba las nalgas,dijo que me quería cojer
Me rei y entendió que aceptaba. Arreglamos para el otro día.
Me invitó a hablar tranquilos en la iglesia. A dos calles hay una iglesia grande siempre abierta. Fuimos por la tarde cada uno por su lado y adentro nos saludamos.
En un costado me tocó a gusto y me besó también en las tetas. Me hizo agachar y le bese la pija un rato.
Fuimos para unas casetas de madera donde se meten los curas y nos metimos. Son muy pequeñas así que quedamos muy juntos.
Se sacó el pantalón y su boxer, quedó sentado con la pija dura y me sacó la ropita. Me hizo poner de frente a caballito de sus piernas y frotando su pija. Me la fue metiendo haciendo que me baje hasta que la tuve clavada. Tenía la remera en la boca para no gritar y el me chupaba las tetas.
Me dejó ensartada hasta que no dolía tanto y me hizo mover arriba y abajo.
Me dolía pero me gustaba mucho, así que aguante y seguí hasta que acabé.
Me sacó la pija me hizo arrodillar y tragar su leche.
Nos vestimos y salimos justo que apareció un cura. Le dijo que le mostraba la iglesia a su sobrina (yo) para que se haga más religiosa.
Así que ahora cuando me quiere cojerme dice que tengo que rezar y ya me voy solita a esperar a la iglesia para queme coja rico