Relatos eróticos esposos toda la vida cap 14 - Relatos Eróticos

Relatos eróticos esposos toda la vida cap 14

... nos dijo que las pingas de estos clientes eran igual de raras que las del cuartel y cachaba rico y que estaba contenta con todo lo que está haciendo.

Le pregunté , si son 25 más o menos, con la del joven y la de tu papá son 27 pingas, no creés que son muchas. Nooo mi amor, yo quisiera que fueran 30 pero vamos a ver qué pasa después.

Esa noche nos contó al detalle como se xaiatean al vuelo, la echan a la cama y en pose de misionero al toque la clavan y en cinco minutos y cinco movidas de mi señora se les viene toda la leche y se van renegando por qué quieren darme dos polvos, sólo algunos lo logran, hay otros que le pueden el culo en primera y así se pasa el día.

Amor, le dije, te dejas besar la boca. No, me respondió yo sólo les chupo la pinga, si ellos quieren me chupan concha o culo y cuando se me echan encima me besan el cuello hasta que se vacean.

En la mañana después de cachar rico mi papá se fue a trabajar y nosotros seguimos en nuestra rutina hasta el domingo que todos descansamos y podemos hablar más.  Pero a ella la veo más rejuvenecida y hasta pienso que la pinga es vitamina para ella.

Estuvimos en eso 30 años sin pensarlo, uno por qué ella cachaba con bastantes hombres y no se inquietaba para nada, dejándonos tranquilos a nosotros, más que nada a mi papá y a mi suegro. En éste tiempo sucedieron algunas cosas, cómo por ejemplo el joven se casó y nos dejó. Mi suegro falleció de un ataque cardíaco y mi papá ya no respondía igual. Así que lo mejor fue ...

... que se quedará ahí nomás y como estaba bien cotizada no le faltaban cacheros y también nuestra fortuna aumentaba.

También les contaré que en éste trayecto cuando mi señora entró a la habitación de mi hijo de 15 años, lo vió dormido calato y con la pinga al palo. Sorprendida me llevó para versela, era bien grande y gruesa como de 20 X 3 y mi señora me dijo, sino fuera su madre me lo cacharia horita mismo. Déjalo,le dije, él estará en su paja.

Al mes nos mandan llamar del colegio a quejarse de nuestro hijo por qué una profesora lo encontró haciéndose la paja en el baño. Asumimos nuestra responsabilidad y hablando con el nos dijo que le pica mucho y tiene deseo de correrse hasta venirse.

Comprendimos que no lo podemos llevar a ningún sitio por ser menor de edad y ninguna mujer tampoco aceptaría para no ganarse problemas.

Le pregunté a mi señora se ella se lo cacharia y de inmediato me dijo que sí. 
Ahora era el como. Me voy insinuando poco a poco hasta que se anime y se mande conmigo o le mentimos diciendo que tu le vas a traer a una mujer y que él debe estar vendado todo el tiempo. 

Nos decidimos por la primera, cuando ella se alistaba por las mañanas, le pediría que le ayude a ponerse las medias. Al otro día le pidió que le eche crema en la espalda, al otro día le pidió su opinión al desfilar en lencería y con el cuerpo bien quebrado y mi señora me contó que después de eso se fué a su cuarto con un tamal dentro del pantalón. Creímos conveniente que el Domingo ...