Bea y mi bisexualidad - Relatos Eróticos

Bea y mi bisexualidad

... conocería a alguien interesante y emprender una nueva relación, que después de seis meses ya estaba empezando a estar necesitada de sexo

tambien.

Pero que al salir a tomar algo contigo y pasar la tarde tan agradable y esta cena maravillosa se me han quitado las ganas de conocer a nadie hoy.

Asi estuvimos conversando largo tiempo. Llegó la hora del cierre del local, había pasado el tiempo volando, nos levantamos y salimos del lugar.

Llegamos donde estaba aparcado el coche y le dije:

Ella acercandose a mi y pegando su cuerpo junto al mio me susurro con voz insinuante,

Y era cierto, al notar su cuerpo pegado al mio, mi polla se había enderezado y poniendose dura por momentos.

Separandome un poco de ella, la mire fijamente a los ojos y le dije:

Se pego a mi cuerpo de nuevo y buscando mis labios nos fundimos en un beso lleno de deseo. Nos separamos, entramos en el coche. Ella me besaba y al mismo tiempo con su mano acariciaba mi polla, mientras yo conducia.

Llegamos a mi casa,entramos en ella y le pregunte:

estaba en ello, cuando Bea se abrazo a mi espalda y pegando su cuerpo al mio me daba besos en el cuello, me di la vuelta y allí estaba, desnuda mostrando la

belleza de su cuerpo que estaba hecho para gozar y darle placer a cada milímetro de su piel.

Se acercó a mi y empezó a sacarme la ropa hasta que me quede desnudo delante de ella.

Pegamos nuestros cuerpos y buscando nuestros labios nos fundimos en una apasionado beso lleno de deseo y ...

... placer.

Mi polla al sentir su piel y aquel beso donde nuestras lenguas se cruzaban con deseo, crecía de tamaño por momentos.

Dejamos de besarnos, ella se agacho y cojiendo con sus manos mi polla empezo a chuparmela. Paramos un momentito y le dije que fueramos a la cama que

estariamos mejor.

Se levantó nos fundimos de nuevo en un beso largo y lleno de deseo y luego entre besos y toqueteos nos fuimos a la habitación.

Entramos en ella y le estuve explicando, que aquella era la habitación del sexo,era una estancia amplia y grande con una cama de grandes dimensiones en el

centro, para poder acceder a ella por cualquier lado y varios sofás de formas distintas, y una gran colección de juguetes sexuales, dildos de diversos tamaños y

grosores a juguetes anales y vaginales, lubricantes de todos los gustos y olores y arneses de varios tamaños y colores.

Le pedí que se tumbara en la cama y acercándome a ella la empecé a besar en los labios y seguí por la barbilla y su cuello hasta llegar a sus pechos besando y

lamiendo cada milímetro de su piel.

Me recree en sus pezones erectos,su respiración iba aumentando en intensidad, seguí recorriendo con mis labios y mi lengua hasta llegar a sus ingles, nos

pusimos en posición de 69 ella agarro mi polla y empezó a besarla y a metersela en la boca.

Yo mientras me estaba comiendo su rico coño y me centraba en acariciar con mi lengua su clítoris erecto, arrancándole suspiros de placer cada vez más fuertes.

Ella ...