Cornudo por gusto - Relatos Eróticos

Cornudo por gusto

Buenas a todos. Lo que les voy a contar es 100 por ciento real, pues resulta que desde hace mucho le pedía a mi esposa que me hiciera cornudo. Desde que nos casamos le decia a mi esposa que se pusiera tangas y dejara que de le saliera el hilo o que se pusiera mayones transparente donde le vieran las nalgas, al principio no querían pero poco a poco fue sediendo.
Despues donde trabajaba tenia que caminar por una vereda y su compañero siempre iba atras de ella, por lo que le compré ropa mas transparente y sus tangas. Ella me contaba como sentia que la miraba y me calentaba mucho. Cojiamos muy rico.
Bueno el tiempo paso y yo busque chavos en Internet y le propuse uno. Ella no queria pero poco a poco la conveci que se escribiera con el.
Cómo a los 2 meses de escribirse fue mi cumpleaños y le pedí de regalo que me dejara verla cojer, ella me dijo que si por que como que ya había confianza con el.
Le dije al chavo y me dijo que solo se cojeria a mi esposa pero que no estuviera yo. Por lo que le comente a mi ...

... esposa y por complacerme me dijo que bueno.
El día de mi cumpleaños la lleve, el la llevo al motel, tardaron como 2 horas. Ella salió bien roja de su cara, y contenta. Al camino a casa me la mamo mientras yo manejaba, le mande un mensaje al chavo para que me digiera que tal. Me contesto que estaba muy rica y que se la había cojido solo una vez pero bien hecho. Llegando a casa nos fuimos derecho a la cama y le mame la panochita sabia bien rica
Me dijo que el chico tenía una rica verga, mas grande y gruesa que la mia. Que desde que llego la empezó a besar y agarrar las nalgas por debajo del mallon. Que después ella se ensimo en el y que le mojo el pantalon, despue que se la metio y sintio como la iba abriendo y que sintio la diferencia, que se la cojio de diferentes formas y la hizo venir muchas veces, que este chavo le había dado la mejor cojida de su vida.
Bueno yo feliz y sobre todo me gusto sentirla abierta y sentir como me mojaba, llevaba 18 años de casados y nunca se había venido tanto.
Me gusta ser cornudo