Me cogi a mi compañera de trabajo - Relatos Eróticos

Me cogi a mi compañera de trabajo

Este relato de las muchas veces que me cogí a mi compañera de trabajo. 
A ella la llamaremos Cindy para no entrar en conflictos. 
Esta historia sucedió hace 10 años aproximadamente, en ese tiempo Cindy ya era una mujer madura, pero muy guapa y con unas tetas impresionantes y una vagina deliciosa (anexo fotos). 
Compartíamos consultorio, ella era divorciada, y eso la hacía muy relajada y nada inhibida, ya teníamos unos 3 años trabajando juntos y nuestra relación era de amistad pero muy llevada, y eso hizo que poco a poco nos empezáramos a gustar y llegó el momento en que le confesé que me gustaba, al principio no quería nada conmigo, pero era evidente que yo también le gustaba; y pues de tanto insistir logré besar sus labios, que he de reconocer que ha sido la mujer que mejor he besado en la vida. 
Poco a poco a esos besos le sumamos caricias y cachondeo en el consultorio, llegando en una ocasión a exponer sus tetas, enormes, blancas, con un pezón café claro que por supuesto mame hasta dejarlas rojas. 
Ya entrados en eso la convencí de ir al hotel, ese día llevaba un vestido corto que le hacía lucir sus hermosas piernas, la recosté en la cama, le quite ...

... la tanga que traía puesta y pude ver por primera vez sus labios vaginales, su clitoris y su vagina, ah y también su ano, los cuales estaban un poco peludos, pero eso no me impidió darle una mamada espectacular recorriendo desde su clitoris hasta su ano. Sin exagerar, los fluidos que emanaban de esa vagina eran deliciosos y me comí hasta la última gota que salió de ella, no sé cuántas veces se vino, pero yo estaba extasiado con el sabor de su vagina y de su ano. Además de poder contemplar el color rosado de la piel de su vagina (ella es rubia), lo cual me ponía a 100. 
Lo que más me gustaba de ella es que era experta en el sexo oral, sin lugar a dudas me dio las mejores mamadas de mi vida y las últimas veces me pidió que se los echara a la boca ya que le empezó a gustar comérselos (otro nivel de sexo con ella). Y para terminar, siempre me gusto su ano por lo que después de varios intentos me dejó penetrarla por su culo, aunque le dolió al principio, lo disfruto tanto o más que yo.
Después de algunos años disfrutando, se tuvo que jubilar y ya no pudimos continuar, pero de recuerdo me quedan fotos y videos de nuestros encuentros. 
Espero les guste mi relato.