... preguntándome. Hija que piensas hacer. Papá hablemos claro, la pastilla que has tomado es potente y sirve para que tengas tus relaciones sexuales como si fueras un jovencito . Cómo esa sobrecarga aún lo tienes en tu cuerpo concentrado en tu pene, tienes que descargarlo y has querido hacerlo con tu mano y sientes dolor.
Lo que yo voy es intentar ayudarte con mi mano, si no se pudiera tendré que usar la boca y si aún así no se puede me utilizaras como una mujer para descargar todo lo que tienes adentro.
No hija, eso no lo puedo permitir, tu eres mi hija, yo no podría dejar que me lo agarres, ni que me lo chupes y menos meterte mi pene.
Papá, sabes en la situación que estás solo hay tres caminos el hospital, buscar una puta o yo.
Aún así yo acepte tu marido que dirá de ti y de mi no, no no.
Sin hablar más le quite la camisa y echándolo a duras penas le quite el pantalon y al sacarle el calzoncillo saltó una pinga monstruosa y saben por qué lo digo, era bien gruesa y las venas eran tan marcadas que parecían bultos , era como un consolador con espuelas y su de por si soy arrecha, esa visión me elevó a mil.
Papá, que es esto le dije. Discúlpame hija. No tienes que disculparte al contrario tu pene es muy lindo. Hija intenta con la mano por favor. Me eché una cremita y comenze a pajearlo pero por los bultos le dolía. Papá le dije como te duele voy a mamarlo por qué la boca es más suave. Ya hija me contestó con dolor , pero por lo grueso no entraba en mi boca y ...
... comenze a chuparle los costados sin encontrar alivio, entonces con las manos saqué los huevos para chuparle, solo pude ver qué colgando no parecían tan grandes y eran unos semejantes huevos.
Papá, hemos llegado dónde no querías llegar pero aquí estoy para que me eches toda tu leche y a ver si yo también lo disfruto.
Hija, te voy hacer dañó por qué eres menudita y yo tengo semejante cosa, así nomás a la chica que viene es más corpulenta y se va con dolores.
Papá, tu no sabes lo fuerte y poderosa que soy , yo me puedo comer esa pinga con gusto y no me quejaría. Así que me quité toda la ropa y mi papá se puso encima con los ojos cerrados. Yo con la mano lo puse en la entrada y le dije papá empujamelo con toda tu fuerza.
Así lo hizo y entró la cabeza y un pedazo más y yo aguantaba el dolor que me causaba esos bultos y otra vez papá empujay entraron como diez centímetros más y el dolor era tan fuerte que grité y mi papá quiso salirse, pero yo lo agarre y le dije falta poco papá sigue así que me está gustando aún con dolor pero está rico. Papá empujó con toda su fuerza entrando todo y más me arrecho que los huevasos me golpearon las nalgas.
Papi, está rico muévete y date gusto y dame toda tu leche que yo también te daré la mía. Así mi papá se olvidó que estaba cachando a su hija y se movía como loco y yo sentía esos granos raspar en las paredes de mi concha, así estuvimos cinco minutos hasta que mi papá aflojó su cuerpo dejándome toda su leche que en mi concha se ...