... creer lo que veía
- Ahora vos, me dijo haciendo la.seña de giro con su dedo índice
Me di la.vuelta tratando de mantener la mejor femeneidad que puedo, y al quedar de espaldas repti su gesto y paré mi cola, girando la cabeza para verla en su reacción
Estaba con los ojos muy abiertos, las manos abiertas apoyadas en sus mejillas y la boca semiabierta
- Mi amor, que pedazo de mujer sos vos!.
Me pasó una mano desde la nuca, bajando lento hasta mis nalgas y llegando a mis piernas.
Fue una caricia tan suave como intensa que me provocó nuevos estertores incontrolables. Mi calentura seguía subiendo y ya estaba lista para lo que me ordene hacer o me hiciera.
Recordé que se había sacado el corpiño y la imité girando para mostrar mis tetas. También tenía los pezones parados y más duros que nunca
Me seguía mirando toda, y me acaricio ambos pechos, aprovechando a morder suave los pezones
- Ahhhh... Gemi de placer
- Falta una parte me dijo en susurro al oido.
Se separó de mí y nos miramos fijo hasta que la ví bajando los elásticos de su bombacha, lo cual imité
Ella se agachó para llevar su bombacha al piso y yo levantando una pierna por vez la dejé caer. Habíamos quedado desnudas las dos.
Nos miramos detenidamente una a la otra. Yo veía a una mujer hermosa, desnuda, con un pequeño triángulo de bello en su pubis. No había señal alguna de su masculinidad a la vista.
- Karen, le dije mirando su triangulito, no tenes...
- Si nena, tengo. Se acercó a mi y poniendo la palma de ...
... su mano sobre mi concha me la recorrió hasta el culo en un roce suave que me volvió a hacer gemir de placer. Yo estaba ardiendo
- Así se hace para saber. Vos no tenes pito, me dijo sonriendo
- A ver vos, le dije y llevé mi mano a su pelvis para tratar de recorrer la división de sus piernas.
Fue increíble ir encontrando entre sus piernas una pija muy caliente, algo dura y que le llegaba al culo
- Así, así busca más me dijo gimiendo.
Cuando sacaba mi mano lento, iba trayendo su pija hacia adelante. Cuando termine de sacar esa pija me encontré con unos 18 cms de carne caliente que estaba a mitad de pararse del todo. Una hermosa poronga que se hizo agua a la boca
- ¡Es grandota! Le dije.
Me pasó su mano por detrás tocándome del culo a la nuca, yo le froté la piel de la pija tratando de ver su punta, cuando sentí que me tomaba de la nuca y me metía la lengua en la boca en un beso muy húmedo y muy profundo que deje seguir hasta que se separó de mi. Nunca le había soltado su pija que la sentía crecer muy rápido y ponerse algo más grande y muy dura.
- Si seguimos va a pasar de todo, me dijo
Cómo toda respuesta me arrodillé con una pierna quedando mi cara a la altura de su pija me la metí en la boca y le empecé a dar una mamada tan profunda como podía.
Me sobaba las tetas y la espalda, y me daba pequeñas cojidas en la boca...
Yo disfrutaba a morir del sabor de esos jugos que me encantaban y del calor que largaba esa poronga gorda. Le chupé los huevos y ella levantando una ...