La historia de Ángel, solo era un muchacho (31)
Fecha: 09/09/2018,
Categorías:
Hetero
Autor: Albany, Fuente: CuentoRelatos
... se exactamente, pero te refleja muy bien y Álvaro ha estado muy acertado.
Terminamos de ducharnos, y yo no me cansaba de acariciar su formidable, duro, y perfecto cuerpo de varonil joven en plena sazón, y aunque habíamos hecho el amor recientemente, y se había corrido dos veces, su verga despertaba ante las caricias que mis manos la prodigaba.
Entonces me apartó las manos de su pene, me abrazó besándome la boca con delirio.
-Déjalo estar o empezaremos otra vez. -sabía que era lo más prudente, llevábamos más de dos horas alejados de los demás, y seguramente algunos sospecharían lo que estábamos haciendo, y aunque no nos preocupaba sería mejor dejarlo de momento, y nos vestimos para estar presentables, por si a su tío Eliseo se le ocurría volver a casa.
-¿Te apetece tomar algo? Tengo te en el frigorífico. -me apetecía y además me permitía seguir a solas, y hora satisfechos de sexo, poder hablarle de lo que me interesaba.
Me senté a su lado, con el vaso lleno de te frío en la mano, y le di un pequeño sorbo antes de hablar.
-Pablo, me gustaría saber lo que hablasteis los tres sobre mi, si no te compromete y puedo saberlo te lo agradecería de verdad. -pasó su brazo por mi espalda y llevándome hacía él me besó con dulzura en la frente.
-No tienes que preocuparte y no era algo importante que ya no sepas.
-Por favor, no me trates como al niño que no soy, no estoy preocupado y es simple curiosidad, pero me sentiría más a gusto sabiendo lo que habláis. -Pablo ...
... me miró y me debió ver muy serio.
-Vale, de acuerdo, podíamos haberte llevado, es verdad y con veinte años no eres un niño al que debamos tutelar. -hizo una pequeña pausa para hacer más fuerte su abrazo y posar los labios sobre mi frente.
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-Habíamos quedado en llegarnos hasta el ambulatorio donde Álvaro pasaría la mañana, y aprovechar alguno de sus improbables descansos para comentar lo que tu sabes, lo que David te comentó cuando estuviste a solas con él, y también lo que Eduardo te pedía en la nota que acompañaba a su regalo.
-A medio camino recibimos una llamada de la enfermera que ayuda a Álvaro, había tenido que salir para atender unas urgencias y la reunión se atrasó hasta la hora de la comida. Nuestro amigo, como siempre, tenía prisa y David no se anduvo por la ramas para comenzar a hablar de lo que le interesaba.
En principio nada diferente a lo que conoces, y como especial que la organización estaba molesta, por la facilidad con que te había concedido la libertad, molesta con su tío don Manuel y con el mismo Álvaro a pesar de la admiración y respeto que sienten hacia él y el poder que sigue ejerciendo su tío.
David, en parte, está de acuerdo con las quejas que algunos miembros de la organización presentan, ya que hasta su marido Oriol tuvo que pagar el canon que se le exigía, y permitir que estuviera con los miembros que le solicitaron para disfrutarle.
-Andrés y Millán, estos más que ningún otro, no cesan de alabar tus virtudes como ...