Desvirginada
Fecha: 29/08/2022,
Categorías:
Jóvenes
Tus Relatos
Autor: Gatitavenus, Fuente: drugsounds.ru
... Jorge cogiéndome brutalmente en contra de mi voluntad.
Días después, Jorge me dejó un mensaje en donde me invitaba a una fiesta con sus compañeros de la universidad, después de meditarlo un poco decidí aceptar. El coraje hacia él ya había bajado y la verdad es que estaba urgida por tener sexo, por sentir la verga de un macho clavármela hasta el fondo y de forma brutal.
Cuando le llamé traté de no hacer evidente mi calentura, y a la vez no le reclamé nada, es más le hablé como si fuera un viejo amigo e hice de cuenta que nada había sucedido entre los dos. No quería darle motivos para que me cancelara su invitación, pues yo estaba segura de que él no desaprovecharía la ocasión para darme la follada que tanto necesitaba.
Como yo no quería que supiera mi dirección para evitar problemas posteriores, lo cité en una estación del metro a las 7pm. Yo lucía un hermoso vestido rojo de una sola pieza, sin mangas, la falda me llegaba justo arriba de las rodillas, y el escote apenas dejaba ver el espacio entre mis pechos. También me puse unas medias de color carne pero de dos tonos más oscuras que el tono natural de mi piel, y unos zapatos rojos con tacón alto.
Jorge llegó puntual y vestido con un traje gris muy obscuro, la verdad es que se veía muy guapo, hasta parecía un hombre decente. Nuestro reencuentro fue muy emotivo, era como si fuéramos novios, nos besábamos y nos hacíamos bromas en el camino.
La fiesta fue en una casa de un amigo de él. Al llegar me di cuenta de que todos ...
... los presentes oscilaban entre los 27 o 28 años de edad, con eso ya no me quedó duda de que Jorge no tenía los 19 años de edad que me dijo cuando chateamos por internet. Además la mayoría de los invitados eran hombres pues eran egresados de ingeniería en donde casi no hay mujeres, y las pocas mujeres que estaban presentes, eran de otras universidades y venían acompañando a sus novios.
Jorge me presentó como su novia ante sus amigos, por un momento me volví el centro de atención entre ellos, eran muy amables conmigo, incluso se peleaban por sacarme a bailar y por supuesto que no faltó el que trató de ligarme.
En los bailes, yo misma les repegaba mi cuerpo de manera sensual, a lo que ellos respondían con caricias y toqueteos en lugares más íntimos de mi cuerpecito, como eran mis nalgas y mis pechitos.
Tras los efectos del alcohol y por lo caliente que yo estaba, varias veces tuve intencionales y provocadores descuidos con mi vestido, incluso llegué a acostarme bocabajo en las piernas de Jorge sabiendo que mi vestido se subiría demasiado y mi ropa interior sería fácil de ver por todos los presentes. Era mi forma de decirle a Jorge que ya estaba excitada y estaba ansiosa por recibir su rica verga en mi interior, pero él no parecía entender mi mensaje.
Pasadas ya varias horas y cansada de tanto bailar, me quedé sentada en el sillón de la sala rodeada por varios hombres, para entonces la mayoría de los invitados ya se habían ido, de hecho solo quedábamos tres mujeres y como doce ...