La trampita 2 - Relatos Eróticos

La trampita 2

... buenas chupadas hasta que se estabilizó y riendo me dice
- Gracias por la ayuda. Sin vos me hubiese lastimado
- Ni loca dejo que te golpees esa pija
Se acomodó quedando extendido casi por completo asomando del agua como un periscopio el mástil de su pija
- Si te gusta, probalo
Me incliné y empecé una mamada en la que da ratos me llegaba al fondo de la garganta
Me gusta normalmente chupar una buena pija, está me estaba enloqueciendo. No podía dejar de chupar y tragar sus jugos más que abundantes.
Sentí sus manos en mis hombros y me dijo
- Ahora, si me permitís, me toca a mí. 
Me ubicó boca arriba, pasó sus brazos por detrás de mi espalda y sus manos me llevaron a dejar mi concha abierta y palpitante al alcance de su boca
¡Me comió!. No me chupó, ni beso, ni lamió. ¡Me comió la concha!
Desde el primer contacto empecé un sonido que salía de mi garganta, semejante a una sirena que no paraba, teniendo picos de intensidad según el momento
Me retorcía, bramaba, me sacudía en espasmos que no paraban
Así me tuvo entre sus brazos hasta que no quedó un mínimo de voluntad en mi. Ningún músculo me respondía, estaba en un sueño, en estado de sock, me había llevado a otro mundo y todo lo real lo veía y escuchaba como en segundo plano, por eso ni siquiera entendí cuando dijo
- Es hora de que la sientas adentro ¿Aceptas?
No respondí. El me bajó suave, haciendo que mi concha abierta como nunca y latiendo como una bomba recorriera esos pocos bellos muy ásperos ahora para los ...

... labios vaginales irritados.
Sentí la punta de esa pija que me rozaba las nalgas, recorría el canal separando y presionando en la.entrada de mi ano
Recuerdo haber abierto los ojos desmesurados, haber arañado sus hombros y haber querido gritar sin que me salga sonido ya que el aire había salido de mi en su estocada.
Convulsione hacia atrás arqueando la espalda hasta que hice tope con sus manos, rebote hacia adelante y me abracé a su cuello con desesperación
Me había metido la pija en el culo, lo había desgarrado y en mis movimientos me había.empalado de una forma que no podía haber imaginado.
Me dejó acostumbrar, si es eso se puede, me besó tan intenso que me distrajo del dolor y empezó a cojerme de una manera increíble teniendome sentada en ese palo inmenso
Sentí que sus manos me hacían subir y bajar a un ritmo creciente, levandome a un interminable orgasmo que me hacía llorar de felicidad. Era un dolor insoportable que me hacía feliz y no podía hacer nada que no fuera estar en un limbo. Ausente de otra cosa que no fuera un goce inimaginable
En un momento pensé que se me iba a salir por la boca, que me había atravesado el cuerpo, sus huevos eran dos piedras calientes que golpeaban mis nalgas cuando me empalaba al fondo y explotó
Juro haber sentido el sabor delicioso de se nectar en el paladar cuando me llenó de leche todo mi ser interior
Me siguió sacudiendo y en un momento me saco su poronga del culo dejándome un vacío increíble
Me levanto en brazos, me sacó del agua y ...