Un domingo de Intercambios - Relatos Eróticos

Un domingo de Intercambios

... otra situación habían dejado de bailar, él estaba sentado en el sillón y mi esposa sentada en sus piernas con su blusa levantada arriba de sus pechos por lo tanto el señor le estaba besando los senos de mi esposa le mamaba los pezones y ella solo disfrutaba. Al ver esa escena la vecina solo dijo, -Se ve que te encanta chupar las tetas.-  mi esposa, se paró respondiendo a la vecina. .-Vecina ahora es todo suyo.- Mi esposa tomo de la mano a la vecina la guio con el señor la sentó en sus piernas para que quedaran frente a frente la vecina y el señor, mi esposa le levanto la blusa desnudándola de la parte de arriba y dejando sus tetas de fuera, su tetas son hermosa unas areolas grandes rojizas con los pezones bien duros como chupones. El señor inmediato los tomo son sus manos y los empezó a besar, y la vecina sin decir nada solo se dejó disfrutar.
Mi mujer se sentó a un lado de ello, quitándose también su blusa de tirantes  dejando sus senos desnudos me jalo hacia ella y me desabrocho mi pantalón bajándomelo con todo y el bóxer, inmediatamente mi verga salió bien dura y parada, rápido se la llevo a la boca  la empezó a dar unas ricas chupadas, estaba tan caliente mi esposa que se la metía toda a la boca, yo veía como viendo los senos de mi esposa y a la vez a la vecina que no decía nada y solo cerraba los ojos de que estaba disfrutando.
Después de unas chupadas de mi esposa se sacó mi verga de la boca, miro a la vecina y ella a su vez veía como me la chupaba, lo que hizo mi ...

... mujer tomo la mano de la vecina y la arrimo hacia nosotros para ponerle mi verga en su boca lo que ella se inclino y me empezó a chuparla, mientras mi esposa trababa de sacra la verga del señor y cuando lo hizo se la empezó a frotar con la mano y después también se inclinó para darle unas chupadas, mientras la vecina me la chupaba a mí, mi esposa se la chupaba al señor. 
Después de unas ricas chupadas a ambos ahora nos tocaba a nosotros, tome a la vecina la pare y la puse en cuatro contra el sofá le baje el pantalón y sus bragas; el señor hizo lo mismo con mi esposa teniendo sus culitos y conchitas expuestas para nosotros se las empezamos a mamar, yo me clave en la conchita de la vecina y le chupaba toda su rajita o mejor dicho su panocha que la tenía muy grande y jugosa, unas nalgas muy ricas no paraba de pasarle mi lengua desde su ano hasta su parte baja de su conchita donde empezaban sus vellitos, una delicia, y lo mismo hacia el señor como mi esposa vie como tenía clavada su cara en culo de mi mujer mamándole toda su panocha, y solo se podía oír como gemían las dos de tanto placer.  
No aguantaba mas con mi verga bien dura y teniendo en cuatro al vecina se la metí toda de un jalón hasta el fondo de su conchita, la vecina solo dio un grito de placer, y mi verga se hundía toda en su vagina notaba que era muy profunda y más apretadita que la de mi esposa, se la metía y sacaba con suavidad pero ella me pidió que más fuerte le diera, y eso empecé hacer con dureza pidiendo mi ...