1. La Toña, golosa insaciable


    Fecha: 16/09/2022, Categorías: Confesiones Autor: adultotricolor, Fuente: CuentoRelatos

    Cuando yo tenía unos 30 años trabajaba en una empresa donde contrataron una secretaria muy guapa, era rubia deliciosa y no tenía mucho trasero levantado pero si a lo ancho, se veía de frente muy rica y apetecible, pero como se vestía bien sexi se veía bien deliciosa y sus senos eso si eran bien levantados y firmes, aun sin sostén, no se pegaban al cuerpo, a pesar de haber sido madre y de buen volumen, además usaba sostenes que le juntaba los pechos para notar más volumen, se vestía muy atractiva, ojos verdes, blanca, despampanante, que a todos nos dejaba boca abiertos.
    
    Esa vez fue como inicio la aventura era mi cumpleaños, cuando fuimos a celebrar con los compañeros a un café y después la lleve a su casa y platicamos un poco de sexo, al platicar de eso ella se interesaba más y cuando le ofrecí si le gustaría conocer mi miembro, ya erecto, accedió como regalo de cumpleaños en el auto me hizo sexo oral y termine en su boca y ella quería seguir y llevarla al hotel pero ya era muy tarde, debía volver a casa y quedamos de seguir al día siguiente.
    
    Esa vez ella se quedó con ganas, pues me invitaba ir al hotel pero ya era muy tarde, como dije, al día siguiente en la oficina no se dieron cuanta aun ella seguía prendida, pocos días después nos fuimos al hotel y nos dimos una tremenda revolcada de historia, faltamos al trabajo y comenzamos como a las 9 de la mañana, fuimos a comprar lo necesario para una especie de picnic hotelero y cuarto nudista.
    
    No salimos hasta las seis ...
    ... de la tarde para cumplir con el horario de trabajo, lo hicimos en la mesa, en el baño, en la cama, frente a la ventana, en el piso, tenía multi orgasmos que explotaba a cada ratito, era muy blanca muy guapa y monumental y media pecosita, pero muy bonita la muchacha de unos 25 o 27 años, con un cuerpo exquisito, sus pezones rosados, su pelos güeros hasta en su monte de Venus, y sus labios vaginales y pezones rosados, y así terminamos con mi miembro y sus labios más rosados de ardor de tanto meter y sacar todo el día.
    
    Practicamos todas las posiciones inimaginables, el Kama Sutra de ida y vuelta, después algunas veces solo teníamos encuentros en el auto, entre la palanca del freno y la mía terminaba yo derramado en su interior, pero eso era también otro show que ya habíamos practicado bastante bien mis penetradas que le daba en el auto, además de las orales, pues estaba buenísima que le hice de todo así duramos casi 4 años haciéndolo, ella según era mi secretaria y teníamos sexo 3 o 4 veces a la semana.
    
    Yo estaba ya empalagado con tanto sexo, pues ella no tenía forma de complacerla totalmente además y pedía dinero, cosas, ropa, la renta de su casa, más le daba y más quería y mas era las ansias de hacerlo donde fuera, en la misma oficina cuando se habían ido a comer todos, se empinaba sobre el escritorio y le daba sus muy buenas entradas.
    
    Llevaba minifalda y a veces sin pantaletas me mostraba abriendo sus piernas todo su lindísimo sexo abierto y jugoso, a la que no podía ...
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